15/2/10

POETISA EN EL INFIERNO


Grita en silencio envuelta en riadas picas,
Empapada y desangrada, consume espinas.
¡Fuente marchita, en tiempos refrescante!
¡Oh soñadora niña! ¿A dónde guía Caronte?

Confundida por el canto de sirenas, caes
en el abismo sombrío, contémplalo frío.
Este infierno cuarteado cruje, distante.
¡Virgilio, atraviesa el fuego llameante!

En el averno, el río coagulado se congela.
¡Rapsoda antiguo, tú nunca comprendes,
el espíritu en tránsito ya no debe sufrir!
Halla una mirada, una eternidad aciaga.

Ávida emocional no continuarás sufriendo,
¿sabes lo que deseas si pudieses obtenerlo?
Te alejas en los brazos de la muerte cruel.
¡Poeta atrapada a las puertas del infierno!

Entre anillos cónicos, Beatriz* te escucha.
Recoge su túnica púrpura y clama al cielo.
Alguien interpreta entre trompetas sordas.
¡El maligno es bestia que susurra sierpes!
Ssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss.


Voz en off desde el infierno:


¿A quién le importa lo que piensas?
¡Continuas, deambulando a ciegas!
*Beatriz: la esperanza en 'La Divina Comedia'.

Esther Ferrer Molinero

5/2/10

ALMA VIVA, VAMPIRA (En el infierno)


¡No duermas nunca, alma viva,
siembra el infierno de vampira!

Escucho tu voz inquietante en el olvido,
transitando por la senda de los muertos.
¡He hallado a la sombra! ¿Será un sueño?

¡Extirpo una espina del costado,
daga pluma, me ha alcanzado!

Una virgen llora ensangrentada, vagaba,
exhalando su espeso aliento, desangrada.
¿Dónde vas tiniebla? ¡En el abismo estaba!

¡Ríos de lava fluyen candentes,
verdes flores, fluorescentes!

Decanta rojas gotas del tintero derramado,
la noche atrapa, enmascarada en un reflejo.
Levanto el vuelo en-sueño, ya no duermo.

¡No duermas nunca, alma viva,
siembra el infierno de vampira!

Esther Ferrer Molinero