30/5/10

IMAGINARIUM KLAUS Nº 8: COSAS DE ULTRAMAR (novela por entregas)


Klaus se miró en el espejo del escaparate, ese en el que nunca se reflejaba y comprobó cómo su silueta comenzaba a perfilarse, cada vez más. Lejos de perder sustancia ganaba consistencia y se aposentaba en su historia de manera holográfica. Una mano a vuelapluma estampaba los trazos nítidos de un relieve abultado. La relatora, con un tejemaneje tramoyista y punzante, danzaba a contratiempo para abrazar a la volátil trama. A Klaus siempre le había desmontado la coqueta duda, quizá, porque podía ver todas las caras de un poliedro descompuesto.


- Debería comprar fruta con intención de consumirla, las manzanas ya no caen de los árboles… y ahora, forman un bodegón marchito en mi frutero- pensaba Klaus desmadejando alguna idea pretenciosa en el ultramarinos del barrio.
- ¡Alejandro, podríamos hacer una cena improvisada! Es tan sencillo como esto: citamos a Marlene y dejamos, por descuido, una carta dirigida a mi hermano Max sobre el arcón… ummmmmmmmmmm… a ver qué sucede… ¿te parece?
- ¡¿Estás loco?!... no dejas de sorprenderme, amigo. ¿Crees que la chica es de esa clase de personas que husmean en la correspondencia ajena?... hombre, eso sería propio de alguien mucho más rebuscado, casi tanto como tú… - le espetó el lenguaraz Alex.
- ¡Estos gambones están de oferta… a la cesta! ¡Voilé! Siendo sincero, debo decir que me cae bien la niña pero no me fío ya ni de la sombra que recientemente me ha abandonado… ¿recuerdas que soy un presunto asesino?... no estoy para andarme con miramientos y aunque sea un encanto, un dulce pajarillo cantor, no me amilanaré en mis pesquisas… ¿o qué te crees Alejandrito?- mirándolo tan fijamente como podía.
-Tú verás, pero te estás mezclando con la testigo principal y eso está contraindicado… ¿un vino blanco con las gambas, no?... aquel albariño de mis amigos de Cambados está bastante bueno, ideal para la ocasión-
- No te preocupes por los detalles, eso sí, deberías avisar a Carlos, quiero que nos acompañe… siempre me invita a las reuniones clandestinas, esas de la política de bloques… y, la verdad, es que son históricas sus conclusiones sin mencionar sus chascarrillos no menos afortunados…

Cuando entraban en la sección de congelados, Klaus tropezó con el carrito de una mujer de aspecto frágil y sintió que le era muy familiar. Un telón nubló su vista aireada y tras un breve suspiro de viento, comprendió que se había topado con la verdad por segunda vez y justo, en el preciso instante en que él la reconoció, se diluyó sin mediar palabra. ¿El alemán debería interpretar algo ante aquella visita inesperada? Algo se recalentaba en su cabeza...


Se pelearon para pagar y salieron apresuradamente del ultramarinos que iba a cerrar. De regreso a casa, la centrifugadora de Klaus no dejaba de repasar con su movimiento de vaivén el entramado de una tela tejida con muchos hilos sueltos...

CONTINUARÁ…


(C) Esther Ferrer Molinero

1 comentario:

GUILLOTINADO EXPRÉS!!!
Cuchillos afilados, cuchillos sangrantes...
rodarán cabezas... ¡Qué le corten la cabeza!