ACALLADA RAZÓN

La contemplo fría, callada, distante,
asfixio la emoción en un instante.
La pretendo, no puedo alcanzarla,
ni aspirarla ni rozarla ni tocarla.
La contengo en un vahído; la emplazo
en la niebla, con celo, la embalo.
La aprisiono en un frasco horadado,
es un perfume, un halo que evado.

¿Es la libertad, una bruma fugaz?

Contengo el aliento, de escalofríos
me alimento. Recorre mi espinazo,
transcurre lentamente sin abrazo.
Suspiros vanos, omitidas caricias,
escurridas las manos, ficticias.
La suelta es juguetona y asediada
por burlona. Ladrona envolvente
de codicia inclemente. ¡Bufona!

¿Es la libertad, una bruma fugaz?

Se esfuma, se ralentiza, me eriza.
Te aclamo por falsaria, libertaria.

ESTHER FERRER MOLINERO

AMIGA BUCANERA

Tengo el velamen extendido,
por directriz, la mayor.
Viejas letras retorcidas
y aflicción de corazón.

Navegan sin ira,
cantos de sirenas
que entona la lira
y aplacan sin treguas.

Tengo el velamen extendido,
por directriz, la mayor.
Viejas letras retorcidas
y aflicción de corazón.

El timonel decidido
endereza una canción.
Las tempestades aguardan,
acalladas las sirenas.

Llevo el velamen extendido,
por directriz, la mayor.
Viejas letras retorcidas
y aflicción de corazón.

De mareas e insidias,
inciertos espolones,
Y de razones tibias,
encuentro tropezones.

Llevo el velamen extendido,
por directriz, la mayor.
Viejas letras retorcidas
y aflicción de corazón.

ESTHER FERRER MOLINERO

PREÁMBULO DEL LLORO

No tengo ojos, sólo cuencas vacías, profundas y frías.
No bebo en pozos de agua clara, sedante gota escarchada.
Y un rumor que es tu amor.


Fuera de mí, lejos, respiran los amantes.
Se abrazan danzantes; rojos, entrelazados.
Una punzada extinta es corazonada.


Me atrapa la vida, si te admiro. Me falta el soplo.
Me hiere la suerte incierta, si aliento al gozo.
Fuerte aprecio que suena a arpegio.



Digna estocada en la frente, directa, transversal.
Fina puntada de muerte, delimita lo trivial.
El alivio del delirio.



Particular sueño, ciego, ajado por enquistado,
rajado por entramado, tejido por consumido.
Ya no lloro. Vivo.




ESTHER FERRER MOLINERO

VISIONES

Es tu boca entreabierta,
dulce palabra temblorosa.
Una mirada encubierta, dibujas,
minuciosa, tras la cortina suave.
Un suspiro aspirado,
el cruel silencio que retumba.
Vuelve, efecto mariposa,
triste anhelo y fría tumba.

Proyecto mis deseos
y son inalcanzables.
Perfilo en el espejo de sus ojos
si siento que hay reflejo.
Desearía escucharlo,
tocarlo por dentro.

En el laberinto
del corazón en carne viva
la mente esquiva.
Vivo de ilusiones desmedida,
muero sin ansia, tibia.
Me muero y no me mira.

Huye.

ESTHER FERRER MOLINERO