30/3/13

SERENDIPIA



Sé en qué barco navego
y nunca sucumbiré a la deriva
de la ideología reaccionaria.

La deriva,
no pretende descubrir pabellones dorados
ni mastabas.
Para muestra un timón a la izquierda
si estás asida muy fuerte.
Y, caminando, se teje el destino.

En el mar arbolado de las piedras importadas,
se levantan moradas.
Los cercos que las separan
son barreras arquitectónicas.

Simulacro lineal de la concha peregrina
que no emana fuente alguna.
Allí asoman lomas de montaña mágica.
De ese lugar, Mahoma, renegó.
Sinuosas piedras de forma almendrada.
¿Piedras de Santiago?
¿Círculo lítico, Stonehengen de Galos?

En su umbral,
no existe voluntad de hierro,
ni Bilbos titanes ni barcos fantasmas
ni titiriteros

de rías plomizas
y dragas.

No se puede sostener.
Tampoco, la lluvia de ideas
de comisiones y sabios
o la conjura de necios,
los despilfarros
y sus descalabros.

No obstante,
racionalismo

y a contracorriente:
serendipia!!!


ESTHER FERRER MOLINERO
Foto: Basilisco.

3 comentarios:

  1. Como siempre, una vez más....Maravilloso conjunto de palabras encadenadas con deseo de rima política poética. Una poesia impresionante. Gracias Esther.
    - Enrique -

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  2. Gracias, Enrique!

    Ningún deseo de rimar políticamente con el estado conservador y menos de hacer encadenamiento o esclavitud ideológica.

    Si existe encabalgamiento... es, únicamente, licencia poética y en mis poemas produce solución errática.

    [Hay miradas torvas que fulminan como las de un basilisco.]

    Por la libertad... y, por supuesto, de expresión!!
    Esther.

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  3. Casi parece que fue en otra vida, pero de vez en cuando viene un flash y tu recuerdo. Un saludo muy fuerte, Esther! jaso

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GUILLOTINADO EXPRÉS!!!
Cuchillos afilados, cuchillos sangrantes...
rodarán cabezas... ¡Qué le corten la cabeza!